Cuándo plantar semilla de marihuana en exterior es una pregunta bastante común, ya que depende de diversos factores y múltiples condiciones, que a la práctica entenderás con facilidad. La época para poder comenzar tu cultivo de marihuana es sin duda la estación de la primavera, y lo primero que tienes que tener en cuenta es que independientemente del momento en que inicies tu cultivo, no cambia la fecha de cosecha, ya que este depende de las horas de luz que recibirá la planta en el momento de iniciar a florecer. Con lo cual, empezar antes o después no hará variar los tiempos de floración, pero si afectará a los demás factores de crecimiento en tu planta.
¿cuando es la mejor epoca para plantar marihuana en españa?
En el hemisferio norte del planeta dónde partimos en este caso de referencia, los expertos afirman que lo ideal sería comenzar a plantar en la primera luna llena de marzo. Hay que tener en cuenta que no se estén dando en ese momento temperaturas muy frías ya que retrasará el crecimiento de tus plantas, provocando junto con fuertes rachas de viento, estrés y debilidad para tus plantas, y por lo tanto más propensas a padecer hongos y plagas. Por lo tanto, a veces es mejor esperar un mes más si te encuentras en situación de que tu clima no sea 100% favorable para tu cultivo. Una planta cultivada en abril puede llegar a tener un mejor crecimiento, tamaño y producción que una planta germinada en marzo, todo dependerá del clima y la variedad que estemos germinando.
También hay que tener en cuenta que mientras más largo sea el ciclo de vida de tu planta, más costes supondrá; por lo tanto, más cuidados en prevención de plagas y hongos, más costes en nutrición, la necesidad de tutorarlas, y más costes en general. Sería muy recomendable hacer una valoración previa para que salga a cuenta nuestra cosecha dependiendo de las inclemencias del tiempo y variedad para encontrar el momento óptimo para que sea económicamente beneficioso para nosotros.
Segun el tamaño y producción a conseguir
Ahora hablaremos del tamaño y producción que deseemos obtener, dependiendo de nuestras necesidades, dependiendo si queremos, una planta pequeña, o una planta grande, sin olvidarnos de que varía el tamaño dependiendo de la genética y predisposición de la planta.
Si lo que deseamos es una planta de mediana o pequeña estatura deberíamos comenzar a germinar a mediados de mayo, dónde el clima es considerablemente mucho más estable y las cantidades de luz diarias son mayores, por lo tanto, nunca tendremos insuficiencia de esta. Con ello conseguiremos una planta compacta y resistente con una estructura fuerte, y también probablemente mucho más sana. No se verá expuesta a las inclemencias del tiempo de los meses anteriores donde la humedad y temperatura a veces pueden hacer peligrar a nuestra planta. Su tamaño hace que su manejo sea mucho más fácil y se puede controlar con mayor detalle problemas causados por hongos, plagas, y otras enfermedades. Igualmente necesitarán de cuidados y fertilizantes, pero en menor medida, tanto por el tiempo de vida de la planta, como debido al tamaño, es un cultivo más práctico y económico. No podemos esperar sacar cantidades grandes con nuestra cosecha, pero es muy aconsejable para cultivadores novatos, tanto por el nivel de inversión como por el nivel de cuidado y de discreción. Un metro es más fácil de disimular que dos, pero recordad que esto puede variar dependiendo de la variedad y que el fuerte olor en algunas variedades puede hacer nuestro pequeño tamaño de nuestra planta inútil remedio si lo que deseas conseguir es discreción.
Si lo que deseamos es una planta vigorosa y grande, hay que tener presente que no va a ser fácil y no aconsejable para novatos ya que se puede caer en una gran decepción. Hay que tener en cuenta que deberemos empezar lo más pronto posible, es decir que el tiempo aplicado en la etapa de crecimiento es proporcional al tamaño de la planta, a su vez su coste y cuidado, pero en consecuencia una mayor producción por planta.
Lo ideal sería empezar antes de marzo, empezando desde nuestra casa, inclusive los más arriesgados en diciembre, pero nunca plantar marihuana en noviembre ya que podría empezar floreciendo. Aunque el clima no sea el propio en invierno, con tenerla bien resguardada, alejada de bajas temperaturas y ofreciéndole buenas cantidades de luz podremos estimular el crecimiento de nuestra planta lo suficiente para más adelante trasplantarla a dentro de un invernadero.
Al inicio no parecerá muy complicado si mantenemos temperatura y controlamos humedad, pero un punto que deberemos considerar como importante es el de proporcionar luz extra a nuestra planta. Hablando en términos de tiempo, la potencia ahora no es tan irrelevante solo la justa para distraer a la planta, para evitar que comience a florecer y arruine nuestro proyecto de super planta.
Se deberá ir haciendo podas cada dos semanas aproximadamente para poder conseguir una planta bien ramificada, para poder así obtener infinidad de ramas. Llegada ya la época natural de siembra en marzo o abril, nuestra super planta ya tendrá un tamaño considerable frente a sus competidoras que acaban de ser germinadas, ya que llevamos meses trabajando en ello. Ahora tocará estar encima de ella más que nunca, sobre todo en la época de floración ya que deberemos protegerla y tutorarla para poder soportar el peso de sus propios cogollos y serán de mucha utilidad y necesidad el uso de mallas para que no caigan. También tocará alimentar muy bien a tu planta, utilizar preventivos, tanto para insectos como para hongos y otras amenazas. Es importante vigilar la seguridad de tu cosecha, ya que la cosecha de una sola planta, aunque dispongas de más, seria tirar mucha dedicación y cuidados al garete.
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